Las 4 herramientas del lenguaje que no conocías

Herramientas para Conversar

Los actos lingüísticos o actos del lenguaje son acciones que ejecutamos al hablar, sin importar el idioma. Estos conceptos están extensamente desarrollados en el libro de Rafael Echeverría "Ontología del Lenguaje". Las conversaciones no van a ser lo mismo una vez que incorpores en tu forma de comunicarte estos conceptos que te presento a continuación. Por ahora les presento los conceptos, iré dedicándole una entrada a cada uno con mayor detalle en las próximas semanas en Xícara.

Afirmaciones:
Cuando nombramos lo que vemos, expresamos lo que observamos. Primero hay un objeto y luego la palabra que lo describe, por ejemplo teléfono, computadora, libro.
En otros casos las afirmaciones también tienen que ver con hechos, experiencias concretas, comprobables y compartidas. Por ejemplo, el clima de ayer o el que predicen hará hoy.
Las afirmaciones pueden ser verdaderas o falsas.

Declaraciones:
Son la forma más poderosa del lenguaje. Mediante ellas el lenguaje es activo, generativo, construye realidad y hace que las cosas sucedan. La palabra declarativa es previa a la realidad y transforma el mundo. Se puede declarar No, si, no sé, gratitud, perdón, amor.

Juicios:
Son los que construyen  nuestra identidad. Hacemos juicios para dar sentido a nuestra vida y responder a la incertidumbre que nos genera el futuro. Cuando calificamos o damos nuestra opinión, hacemos juicios acerca de todo a nuestro alrededor, nosotros mismos y acerca de los demás.

Pedidos y Ofertas:
Probablemente el de mayor relevancia para nuestras relaciones con otros. Muchas veces, los compromisos no se cumplen debido a que el pedido o la oferta no está bien elaborado, o no fué entendido por la otra parte. Si no se pide lo que se necesita correctamente, y se desconoce si la otra persona aceptó o no el pedido, es imposible para el otro conocer la necesidad que se debe cubrir, de ahí su relevancia.

Siempre que nos comunicamos, ejecutamos algunas de estas acciones del lenguaje. Al adquirir estos conceptos se está en la capacidad de utilizar el lenguaje como instrumento de transformación tanto individual como organizacional. Al distinguir las características de la forma en la que hablamos comenzaremos a utilizarlas efectivamente y podremos desarrollar una mejor comunicación. Los juicios pertenecen a quien los dice, cuando se escucha se puede pedir a esa persona a que los fundamente para así entender o reformular los mismos. La ontología del lenguaje sostiene que al hacer una afirmación estamos generando un compromiso frente a lo dicho, no solo si es verdad sino también si es relevante. Por otra parte, cuando declaramos algo, se espera que seamos consistente con lo que hemos dicho. Y cuando hablamos de pedidos y ofertas, irremediablemente lo debemos relacionar con el compromiso y por lo tanto con la confianza que podemos generar en los otros.

Puede que en un principio parezcan conceptos sencillos, cotidianos, del día a día... lo son. Pero por lo general están bastante olvidados. Mi intensión es desarrollarlos con mayor profundidad para ayudar a más personas a entenderlos, y con suerte generar un cambio en sus relaciones, como lo generaron en mi vida.